Como suele ocurrir con casi todas las obras de rehabilitación, también en el caso de la obras de la Curia General, las cosas no marchan como deberían. Como es bien sabido, a partir de septiembre de 2016, en la Nocetta se realizará el curso de preparación a la profesión solemne. Si en esas fechas las obras no estarán terminadas habrá que suspenderlas y aplazarlas al año que viene. Considerando la situación actual sabemos que, por motivos técnicos, habrá que posponer al próximo año el nuevo ascensor y el montaje de la escalera antiincendios. Como es de suponer, las obras complican la vida de los hermanos residentes en la Curia General y de los colaboradores que trabajan en ella.

 

Sin embargo podemos decir que se pueden ver ya los progresos positivos que se han dado mientras tanto. Ya se han montado las cabinas de los interpretes en el aula y el gran ventanal que se había preoyectado aporta una visión completamente nueva de la sala. Las obras de la tercera planta ya están casi finalizadas. Para proporcionar más seguridad, de cara al futuro, todas las habitaciones tendrán detectores de humos. Todas las habitaciones estarán además dotadas de climatización. Ya se han montado los paneles solares en dos tejados del edificio. Las obras de las puertas cortafuegos de las escaleras y de los pasillos en base al sistema antiincendios ya han finalizado. En las próximas semanas se montarán las puertas antiincendios y en las primeras semanas de agosto se realizará la instalación de climatización de la cocina.

 

El final de las obras, que en principio estaba previsto para el 15 de agosto, se aplaza al 30 de agosto. Esto significa que el curso de preparación a la profesión solemne se podrá realizar con normalidad.

 

Por ahora, casi todos los costes respetan el presupuesto establecido, excepto los costes del sistema antiincendios que han registrado un incremento a causa de una serie de requisitos añadidos que las autoridades competentes han impuesto.