
Hoy, 17 de octubre de 2025, ha concluido la Asamblea de Superiores Mayores,
tras una semana intensa de trabajo, discernimiento y fraternidad. Han sido días
de ejercicio colectivo de liderazgo, escucha y compartir, con una mirada atenta
a los desafíos del mundo actual y a la misión hospitalaria de la Orden.
Uno de los momentos más significativos fue la audiencia con el Papa León
XVI, el miércoles 15 de octubre, durante la cual el Santo Padre ofreció una
catequesis profunda y provocadora (https://www.vatican.va/content/leo-xiv/es/audiences/2025/documents/20251015-udienza-generale.html).
Un fuerte llamado a la sencillez evangélica, a la responsabilidad vivida como
servicio y a la necesidad de liberarse de toda forma de autorreferencialidad
para redescubrir la auténtica alegría de la vocación.
Así lo reafirmó también el General en su discurso de clausura que los roles
de poder no dan felicidad.
Hno. Pascal invitó a reavivar el fuego de la vocación hospitalaria,
recordando que el religioso no es un administrador, sino un guardián de la
dignidad humana, un artesano de la ternura divina. Subrayó la urgencia de salir
de la mediocridad y de la rigidez de los hábitos para acoger el cambio que el
Espíritu Santo quiere obrar en la vida de la Orden.
Con palabras sentidas, él ha exhortado a “no dejar que se apague el fuego
de vuestra vocación. Que vuestras manos permanezcan abiertas, vuestros
corazones ardientes, vuestras obras audaces y animadas por el Espíritu.”
«¡Es tiempo de elegir!». «¡Somos promotores de esperanza!». Él dijo
con fuerza de salir de la noche, de dejarse renovar por el Espíritu, de
atrevernos como San Juan de Dios.
La hospitalidad, reiteró, es hoy más que nunca una opción de valentía y fe,
una forma de hacer visible la esperanza en el mundo. Con esta certeza, Hno. Pascal
confió a los Superiores Mayores la misión hasta los próximos Capítulos
Provinciales de 2026, asegurando la cercanía del Gobierno General y la guía del
Señor.